A día de hoy, es cada vez más frecuente la reforma de casas antiguas. Quizá uno de los motivos sea que las casas del medio rural —que muchas parecían haberse quedado vacías y abandonadas en los últimos años— ofrecen ahora ciertos “lujos” que difícilmente podemos encontrar en la ciudad. Salir al aire libre, disfrutar del entorno… Son delicias que valoramos mucho más en tiempos de pandemia.

Ahora bien, muchas personas se preguntan cómo reformar una casa antigua sin gastar mucho. Si este es tu caso, tal vez porque estás pensando en reformar una casa antigua como segunda vivienda, como alquiler vacacional, o directamente para vivir en ella como primera residencia, esto te interesa.

A continuación, te contamos todo lo que necesitas saber sobre cómo reformar una casa antigua sin gastar mucho. ¡Toma nota!

¿De qué depende el precio de reforma de casa antigua?

Esta es una de las preguntas más comunes y que en realidad no tiene una respuesta predeterminada: ¿cuál es el precio de reforma de casa antigua? Si estás pensando rehabilitar una vivienda, el precio no debería frenar tus motivaciones, ya que este dependerá de muchas y muy diversas variables. Esto es, cada proyecto de reforma de casa antigua cumple con unas particularidades concretas, así, sus necesidades son también distintas.

Por tanto, debes saber que el precio de reforma de casa antigua no se trata de una cantidad fija, sino que dependerá de cuáles son los cambios y arreglos indispensables para hacer de la vivienda una casa con estilo, cómoda y a tu gusto.

¿Cómo calcular el precio de reforma de casa antigua? El primer paso es identificar las necesidades más urgentes, ya sea reparar daños en la vivienda, mejorar la funcionalidad de los espacios o simplemente remodelar la estética. En cualquiera de los casos, marcar las prioridades te ayudará a la hora de asignar el presupuesto y, aún más importante, establecer unos límites económicos a los que ajustarse.

3 consejos esenciales y las mejores ideas para reformar una casa vieja con poco dinero

En este apartado, vamos a centrarnos en los mejores consejos e ideas para reformar una casa vieja con poco dinero. Antes de empezar, debemos desechar el pensamiento de que gastar poco es sinónimo de malos resultados. Las ideas para reformar una casa vieja pueden ser infinitas e incluyen muchas posibilidades: se trata de saber jugar bien con el material inicial, las herramientas y el presupuesto. ¿Empezamos?

1. Analiza las condiciones actuales de tu casa antigua

Es importante identificar cuáles son los cambios más urgentes a la hora de reformar una casa vieja. ¿En qué debes poner atención? Deberás revisar especialmente la estructura, las instalaciones (eléctrica y de fontanería) y el aislamiento (térmico y acústico), ya que su estado será una variable determinante en tu presupuesto.

En cuanto a estas tres cosas, tenemos que decirte que no es buena idea para reformar una casa vieja escatimar en el arreglo de ninguna de ellas. ¿Por qué? Principalmente por motivos de seguridad. Así, lo más recomendable es evaluar su estado y en base a este análisis, hacer una lista con las prioridades. Quizá haya algunas cosas no tan importantes que puedas posponer.

2. Aprovecha para sacarle partido a elementos antiguos

¿Tienes claras las necesidades? Bien, pues ahora es el momento de observar con detalle la vivienda. Una magnífica idea para reformar una casa vieja con poco dinero es aprovechar elementos ya existentes y sacarles el máximo partido. De esta manera, ahorrarás los costes de su remodelación y darás a tu casa antigua un toque más personal.

¿Algunas ideas para reformar tu casa vieja aprovechando lo que tienes? Empieza por la distribución: qué espacios son los que más posibilidades tiene, ¡aprovecha la luz! No dudes en cambiar la distribución de las estancias si crees que así las disfrutarás mejor. La cuestión es optimizar al máximo la estructura de tu casa.

En cuanto a los elementos disponibles: ¡dale rienda suelta a la imaginación! Paredes con la piedra y el ladrillo a la vista, imperfecciones que pueden convertirse en un motivo ornamental, muros gruesos en los que podría construirse una librería o un armario empotrado, abrillantar azulejos antiguos, suelos que no encontrarás en ninguna otra parte, vigas de techo con mucho encanto, ¡las molduras en techos son tendencia! Y un largo etcétera que dependerá de tu creatividad.

3. Confía en los profesionales

¿Es esto una buena idea para reformar una casa vieja con poco dinero? La verdad es que sí. Y es que no debe contemplarse como un gasto, sino como una inversión. Un equipo de profesionales será clave para que no tengas que pagar dos veces por lo mismo, algo que acabarás agradeciendo con el paso del tiempo.

Un buen equipo te ayudará a evaluar el estado de la casa antigua e identificar las necesidades con el criterio requerido. Podrá aconsejarte como es debido en los cambios y modificaciones necesarias, los materiales más recomendables. Además de asesorarte en los términos técnicos y legales (ten en cuenta que deberás solicitar permisos de obra y llevar a cabo algunas gestiones más). Si quieres asegurarte de la correcta ejecución de tu reforma de casa vieja, lo ideal es que te dejes ayudar por un equipo experto.

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